07 Jun El dar y el recibir en la relación de ayuda
Muchos conflictos surgen a raíz, justamente, de la difícil decisión de buscar un equilibrio entre el dar y el recibir o entre, el también llamado, dar y tomar.
Para entender por qué ocurre el desequilibrio, tenemos que comprender que en el universo todo se manifiesta y todo se materializa, con lo cual, esa descompensación, nos está mostrando algo de nuestro sistema familiar y de nosotros mismos en nuestra parte más profunda, que necesita ser sanado.
Por ejemplo, escucho mucho en mi consulta:
- “Me gusta mucho dar a los demás. Lo doy todo…”
Y cuando le pregunto:
- “¿Y recibir?”.
- “Eso me da igual. No doy para recibir algo a cambio”.
Está actitud nos está indicando que nuestro cliente tiene mucho conflictos en sus relaciones, porque desde “su buena conciencia” (normas, valores, creencias) está impidiendo que el otro devuelva eso que ha recibido.
Es decir, al igual que a mí me gusta dar, al otro también le gusta y cuando lo rechazamos, no le estamos permitiendo que la relación se equilibre, dejando en el otro “algo pendiente de devolver”, lo cual genera mucha frustración, y la relación se termina rompiendo.
También se evidencia un desequilibrio cuando el otro nos devuelve y no estamos contentos con la forma en la que lo hace, bien porque no nos gusta lo que nos da o bien porque creemos que merecemos más. Entonces, de algún modo lo despreciamos y ahí, nuevamente, estamos rechazando lo que el otro nos da, es decir, no estamos permitiendo que fluya el equilibrio entre el dar y el recibir.
Tenemos que comprender que somos seres sociales y que, desde el mismo instante de nuestro nacimiento, estamos recibiendo, vivimos gracias a la ayuda de otros. En el momento en el que somos agradecidos con la ayuda recibida, podemos volcar esta ayuda a otros y así todo fluye. Si no somos capaces de ayudar a otros nos atrofiamos, como un río estancado que no es capaz de fluir hacia el mar. Todo es equilibrio, sincronicidad e información.
Ese bloqueo que nos impide dar o recibir, nos está mostrando que existe algo a nivel inconsciente que no ha sido resuelto, quizás un ancestro ha sido engañado, estafado, quedando bloqueadas esas emociones de desconfianza de traición, en nosotros, atrayendo a personas que nos traicionan, nos engañan, nos estafan o haciendo todo lo contrario, siendo nosotros los que engañamos, a otros porque a nivel profundo nosotros le hemos dicho por “amor arcaico” o “amor ciego”, “yo como tú”.
Observamos desde la mirada sistémica que la historia se repite para ser sanada, pero también hay una parte importante que tiene que ver con nuestra actitud ante la vida.
Para ello hay que tener en cuenta las reglas del buen el dar y el buen recibir:
- Sólo se da lo que cada uno tiene, esto es, que solo puedo dar aquello que tengo. Parece lógico pero muchas veces entramos en juegos de manipulación donde queremos ser más que el otro, o mostrar algo que no somos o no tenemos, dando más de lo que podemos, entrando en una espiral que termina mal para todos. Por eso es importante reflexionar, conocerse y saber hasta qué punto puedo dar.
- Dar en la proporción que el otro pueda devolver, es decir, no dar de más, pues eso coloca a la otra persona con un gran peso, se encuentra en deuda y siente que no puede devolver porque ha recibido mucho. Por ejemplo, tenemos un amigo que necesita un lugar para vivir y nosotros podemos alquilarle un piso, pero como nos acaba de tocar la lotería, y le regalamos una vivienda. Eso, que desde nuestra mente creemos que es un acto de generosidad, en el fondo, el inconsciente lo vive como un desequilibrio, una deuda que ese amigo siempre tendrá con nosotros porque no puede pagarlo, y esa energía queda atrapada en la relación generando conflictos. Incluso, es posible, que esta persona pierda ese piso, es decir, que no lo acepte para no sentirse en deuda.
Lo mismo pasa cuando queremos hacer nuestro trabajo gratis. Muchas veces la persona se siente tan en deuda con el terapeuta, que prefiere renunciar a los beneficios que le ocasionó la sesión antes de estar en deuda.
- Sólo se debe esperar y se debe tomar lo que realmente se necesita. Aquí es importante estar conectados con la realidad, es decir, olvidar nuestro pensamiento “mágico” con respecto a lo que a nosotros nos gustaría o lo que desearíamos, y aceptar lo que el otro nos puede dar sin expectativas, así como también tomar del otro aquello que podemos devolver.
- Renunciar a querer hacer o asumir algo de la otra persona, es decir, debemos de confiar en que cada uno puede con aquello que le toca vivir, y el asumir algo por otra persona le quita su fuerza. Como observamos en cada constelación a nivel profundo, existen fidelidades a los ancestros y al sistema, y cada dificultad es una oportunidad de sanar algo que lleva mucho tiempo esperando a ser liberado. Pero este movimiento no siempre es fácil, ya que existen resistencias al cambio, a dejar de lado nuestras creencias, nuestras costumbres, nuestros valores, etc. pero es justamente ese sentimiento de malestar, el que va a generar un movimiento diferente en nuestra vida hacia una nueva toma de conciencia que nos permite liberarnos y liberar al ancestro, evitando que se repita en las siguientes generaciones. Si la persona no asume su vida, no se genera el movimiento y pierde su fuerza.
En este breve resumen hemos visto el primer orden de lo que Bert Hellinger llamó los “órdenes de la ayuda”, y que será el tema del taller monográfico del 16 de junio en Espacio Arcadia, en A Coruña.
Pero también observó que existen 4 órdenes más en relación a la ayuda y ellos son:
- Respetar el destino de la otra persona
- Estar en una relación de Adulto a Adulto
- Observar a esa persona como miembro de todo un sistema
- Estar al servicio de la reconciliación, es decir, unir aquello que antes estaba separado.
En este taller profundizaremos estos conceptos con ejercicios y constelaciones que nos ayudarán a comprender cómo nos relacionamos con los demás y cómo es la “buena ayuda”.
Si esta información resuena contigo y quieres profundizar, te animo a que reserves plaza o si tienes dudas te las aclararé encantada en el número de teléfono 667 294 080 (Alejandra)
Día: Domingo 16 de junio
Horario: 16:00 a 20:00
Precio: 75€. Tienes 5 euros de descuento si reservas antes del 11 de junio.
Muchas gracias por tu tiempo.
Hasta el próximo post…
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